Polestar

Polestar 4: El SUV Coupé Eléctrico que Rompe Moldes ⚡️🚗

¿Te imaginas un SUV coupé eléctrico que desafía las convenciones? ¡El Polestar 4 ha llegado! ¿Qué lo hace tan especial? 🤔 Descubre su diseño, tecnología, autonomía y precio en este análisis completo.

7 de sep. de 2024 — 9 min read

Polestar 4 Plateado

¡Hola, amantes del automovilismo! 👋 Hoy nos adentramos en el mundo de los coches eléctricos con el nuevo Polestar 4, un SUV coupé que promete revolucionar el mercado. ⚡

Polestar, la marca sueca de automóviles eléctricos de lujo, se ha propuesto lanzar un coche nuevo cada año hasta 2026. En 2023 fue el Polestar 3, las primeras unidades del cual se entregarán en los próximos días. Y en 2024 es el turno del Polestar 4.

Este coche, el Polestar 4, se sitúa por tamaño y planteamiento entre el Polestar 2 y el Polestar 3, porque en Polestar el número del coche no indica el tamaño, sino la secuencia de lanzamiento. Hoy vamos a descubrir todas las características de este nuevo Polestar 4, eso sí, sin conducirlo, algo que tendremos ocasión de hacer muy pronto, en el mes de junio.

Este tercer modelo eléctrico de Polestar mide 4,84 m de largo por 2 m de ancho. Ojo, que con los retrovisores desplegados se va a 2,14 m, y 1,54 de alto. Está, por lo tanto, más cerca de los 4,90 del Polestar 3, que de los 4,60 del Polestar 2. Y tiene una distancia entre ejes generosa de 3 m exactos.

Y es que, en contra de lo que podría parecer lógico, este coche no utiliza ninguna de las plataformas de sus hermanos ya existentes, sino una tercera, la primera propia de la marca.

El frontal es muy afilado, muy dinámico, muy limpio. Hay dos características aquí: la primera es que prescinde del alerón integrado que sí tiene el Polestar 3. Y la segunda es que el martillo de las luces diurnas, en este caso, está partido. En el resto de Polestar estas dos partes lumínicas están juntas en un único elemento, mientras que aquí tenemos esta franja del color de la carrocería que pasa en medio.

La parte de refrigeración la tenemos abajo, es una parrilla no muy grande, como corresponde a un coche 100% eléctrico.

La aerodinámica es lo primero que viene a la cabeza cuando vemos el lateral de este coche por las formas que tiene, pues la manera cómo está construido. Este pilar A, por los elementos integrados. Ahora las manecillas están fuera, pero quedan integradas dentro. También los cristales están completamente enrasados.

Además, este coche es un coupé crossover, esta nueva moda que existe ahora de los coupés con este aspecto un poco de todoterreno y sobre todo con cuatro puertas, pero un coupé que se aprecia entre otras características: debe tener puertas sin marco. Y este coche tiene puertas sin marco. Como veis, el cristal baja, no queda el marco aquí. Esta es una característica, insisto, habitual en las carrocerías coupé que este coche respeta.

Vamos a la parte trasera que es, sin duda, la más sorprendente. Antes os diré que las llantas pueden ser de 20 o de 22 pulgadas. Diseño minimalista en esta parte trasera con esta línea de luz que atraviesa el coche de lado a lado, y sobre todo con el elemento que yo creo que generará más controversia aquí detrás, que es la ausencia de la luneta sustituida por una pieza de plástico.

Es una idea nueva, es un tema estrictamente de diseño. También es cierto que al ser de plástico pesa menos que la luneta de cristal, pero en cualquier caso es una apuesta estrictamente de diseño.

Como os podéis imaginar, al no existir luneta, no tenemos visión directa, retrovisión convencional, pero eso se soluciona y ya lo veréis después dentro con la presencia de estas cámaras de aquí arriba.

Esta solución inédita en la industria se justifica para poder ofrecer un techo de cristal más largo, que por cierto, tiene un efecto electrocrómico opcional para oscurecerse a voluntad del usuario. Y lo cierto es que se consigue, porque si hay una manera de conseguir que desde aquí atrás se respire esta sensación de amplitud y de luminosidad, es que el techo pase por encima de las cabezas de los ocupantes traseros. Y eso se consigue.

Que luego hubiera que quitar la luneta, ya es otra decisión, digamos, que a mí no me acaba de convencer, pero en cualquier caso este super techo de cristal es una de las mejores características que tiene este coche.

Estas plazas traseras son muy amplias. Fijaos que tengo mucho espacio para las piernas y este asiento está incluso un poco más hacia atrás de lo que yo lo pondría para conducir.

También es cierto que es un coche eléctrico y que es un coche eléctrico relativamente bajo, digo relativamente porque los eléctricos ya sabéis que son coches altos entre otras cosas, porque tienen más o menos este espacio en el piso ocupado por la batería.

Los pies quedan arriba, la banqueta está bastante inclinada, algo que también es muy habitual en los eléctricos, pero la posición que se adopta aquí es buena. Queda un poco de espacio al techo, no mucho, pero si alguien es más alto que yo simplemente puede hacer esto, echar el asiento un poco más para atrás eléctricamente, por lo tanto tenemos la posibilidad de regular el respaldo y conseguir una posición mucho más relajada y poder disfrutar de la vista del cielo.

Son plazas relativamente anchas aunque, como es habitual en la mayoría de los coches modernos con esta plaza central, un poquito más estrecha. Si replegamos esto, vemos que esta zona es un poco más corta de banqueta y que el respaldo es mucho más duro que este, que yo estoy disfrutando ahora mismo.

Los ocupantes de las plazas traseras disponen de una pantalla para regular la climatización y para acceder al equipo de información y entretenimiento situada al final de la consola central delantera.

Interior muy limpio, muy minimalista, muy escandinavo, es decir, lo que está de moda ahora: un interior en realidad muy Tesla, es decir, con solo la pantalla central muy grande y eso sí, una instrumentación justo detrás que nos permite consultar las principales informaciones de la conducción.

A mí estos coches que prescinden de esta instrumentación no me gustan, por lo tanto, me encanta que Polestar haya mantenido, a pesar de que pasa absolutamente todo por la pantalla, y esto es ya casi inevitable, esta instrumentación detrás del volante para no tener que estar girando la cabeza constantemente, consultando, por ejemplo, la velocidad, también en la pantalla central. Punto a favor.

Otras cositas de este interior: aquí tenemos un cargador de móviles. Esta es la salida de aireación. Esta consola elevada que también está de moda, que complica un poco el acceso a la parte inferior, pero que en cualquier caso, insisto, es otra de las modas en marcha.

Como lo veis, y vuelvo a las pantallas, el hecho de eliminar prácticamente todos los botones físicos, con esto se ganan dos cosas: la primera es en diseño, ese minimalismo que nos guste o no, está tan de moda, y por otra parte, la eliminación de botones hace que se eliminen componentes dentro del coche, y eso abarata también, en cierta manera, el interior de un vehículo.

En este caso, solo tenemos este botón de aquí, ¿que diréis? ¿Hombre, el cambio, no? Pues no, el cambio está aquí, como en la mayoría de eléctricos ahora, que se colocan detrás del volante. Y esto de aquí es simplemente el botón del volumen de la radio, girando, y el de pasar canciones. Le damos y suena la siguiente.

El cuadro de instrumentos digital de 10,2 pulgadas se complementa con un HUD display con una zona de proyección de 14,7 pulgadas y una función inteligente de modo nieve que cambia el color del texto de blanco a amarillo en entornos nevados.

El sistema de infoentretenimiento está firmado por Android Automotive y la plataforma Snapdragon Cockpit y utiliza una pantalla de 15,4 pulgadas en formato horizontal. Cuenta con los servicios de Google integrados, incluyendo Google Assistant, Google Maps y Google Play.

En el apartado de seguridad, este coche tiene nueve airbags y un sistema de ayudas a la conducción que funciona con un radar con 12 sensores de ultrasonidos y con 12 cámaras. Fijaos que solo en esta zona tenemos una aquí, otra aquí, y esta de aquí perfectamente carenada.

Tiene todas las ayudas a la conducción habituales en un coche de este tipo, incluyendo el cambio automático de carril. Basta con poner el intermitente para que el coche vea si viene alguien por el carril contigo y él solo se coloca en el carril que hemos elegido.

Los acabados son muy buenos y los materiales son los que se encuentran en los coches modernos: con plásticos reciclados, tapicerías de cuero sintético, telas realizadas con el reciclaje de botellas de plástico y de antiguas redes de pesca y cuero certificado con bienestar animal en aquellas marcas que, como Polestar, todavía ofrecen este material como tapicería de asientos.

526 L tiene el maletero de este Polestar 4. Curiosamente, son 42 más que su hermano mayor, el Polestar 3. Es un espacio muy grande, sobre todo muy profundo, no es muy alto, también es cierto, y el umbral queda bastante elevado, pero tenemos un doble fondo. Podemos situar el piso un poquito más abajo, ganando unos 7 u 8 cm y, además, debajo tenemos todavía otro hueco para el kit antipinchazos, para el cable de recarga, para dejar algunas cosas de este tipo. No hay bandeja. Lo único que tenemos es esta pieza que sube y baja y que aísla un poco la parte del habitáculo y para cerrar para abajo.

Con los asientos abatidos son 1536 L de capacidad.

El Polestar 4 estará disponible en dos variantes, una de un único motor y otra con dos motores. La batería es la misma para ambas versiones, es de 100 kWh de capacidad bruta.

Las dos versiones, la primera es de un solo motor, 272 caballos, tracción trasera. La segunda, con dos motores, tracción a las cuatro ruedas. Hay un motor sobre cada eje, tiene una potencia de 544 caballos. Polestar ha decidido que la versión más prestacional de este coche, la de 544 caballos, sea más potente que las versiones de dos motores del Polestar 2, que se queda en 476 caballos, y del Polestar 3, cuya versión más prestacional está en 517. Por lo tanto, ahora mismo el Polestar 4 de dos motores es el coche más potente de la gama del fabricante.

El coche tiene un chasis en el que es posible montar una suspensión semiadaptativa y la marca asegura que se tratará de un coche deportivo pese a superar las dos toneladas de peso.

Con la misma batería, la autonomía cambia en función de la versión. La de un único motor homologa 600 km, mientras que su hermano más potente alcanza 560. Las prestaciones también cambian, claro. La versión de 272 caballos alcanza 180 km/h y acelera de 0 a 100 en 7,4 s, mientras que el de 544 caballos es más rápido tanto en velocidad 200 km/h como en aceleración con 3,8 s.

Con un sistema de 400 V, la batería fabricada por Catl y con refrigeración líquida, carga a un máximo de 200 kW, lo que garantiza una carga del 10 al 80% en media hora.

Si os habéis enamorado del Polestar 4, que es perfectamente posible porque realmente es un coche fantástico, debéis saber que ya está a la venta y que las primeras entregas se realizarán en el mes de julio, es decir, antes del verano.

Precios para la versión de 272 caballos y de un solo motor, 65.900 euros. Para la versión de dos motores, 7000 más, 72.900. Insisto, ya está a la venta.

Enlaces Relacionados:

¿Qué opinas del Polestar 4? ¿Te convence su diseño? ¿Crees que es una buena alternativa a los SUV eléctricos de la competencia? ¡Déjanos tu opinión en los comentarios!

¿Te gustaría recibir más contenido sobre autos? ¡Suscríbete a nuestro blog!