¡El Seat Ibiza Kit Car: Un Campeón del Mundo Nacido en la Calle! 🏆🚗💨
¿Te imaginas un coche de calle que se convirtió en un campeón del mundo de rally? ¡El Seat Ibiza Kit Car logró lo imposible! ¿Cómo un coche con una base tan modesta pudo conquistar las pistas más desafiantes? Descubre la historia de este campeón que desafió las expectativas.
¡Hola, fanáticos del automovilismo! Hoy vamos a adentrarnos en la fascinante historia del Seat Ibiza Kit Car, un coche que desafió las expectativas y se convirtió en un campeón del mundo de rally. 🚗💨
Un sueño hecho realidad:
Desde pequeño, me encantaba el Seat Ibiza Kit Car. Era un coche que se veía tan agresivo y tan listo para la acción, que me dejaba con la boca abierta. 😮 En una tienda de miniaturas, vi un modelo a escala del Seat Ibiza Kit Car. Recuerdo que era una versión de resina y que me fascinaba. ¡No podía imaginar que algún día podría conducir uno real! 🥺
El nacimiento de un campeón:
El Seat Ibiza Kit Car llegó al mundo en 1996 para competir en la disputada categoría de 2 litros, conocida como F2. 🏁 Se enfrentaba a coches de tracción delantera con motores atmosféricos de 2000 cc, como el Peugeot 306 Maxi y el Renault Mégane Kit Car.
A primera vista, el Seat Ibiza Kit Car era un coche robusto, pero con 250 caballos de fuerza no era el más potente de la categoría. Su chasis tenía algunos puntos débiles que lo limitaban a la hora de transmitir la potencia al suelo y en los pasos por curva. 🤔 ¿Cómo logró entonces ganar tres veces seguidas el mundial? 🏆
La clave del éxito:
La respuesta está en su robustez y su consistencia en las participaciones. Mientras que Peugeot y Renault se limitaban a competir en pruebas de asfalto, Seat apostó por un calendario que incluía pruebas de asfalto, tierra y nieve. ❄️
En su primera participación en el Rally de Montecarlo de 1996, el alemán Erwin Weber terminó décimo, mientras que el cántabro Chus Puertas ganó solo una prueba de la categoría de dos ruedas motrices ese año. Pero para ganar el primer mundial en 1996, Seat contó con la inestimable ayuda del piloto andorrano F. Fons junto a su copiloto Juan Sureda. ¡Lo mejor de todo es que no contaron con un Seat Ibiza Kit Car oficial! 🤔
Un sueño de garaje:
Utilizaron un Seat Ibiza Cupra que les servía como "muleto" para los reconocimientos de los tramos los jueves anteriores a los rallies del mundial. ¡Imagínate! ¡Un coche de calle con barras antivuelco atornilladas al chasis y no soldadas como las de los coches oficiales! 😳 Incluso la caja de cambios era de origen. ¡El mismo jueves ese coche se preparaba para el rally para inscribirlo en la categoría más próxima a la serie: la Grupo N.
En ese entonces, los coches del Grupo N con motores atmosféricos de 2 litros y tracción delantera también sumaban puntos para la conocida Copa F2, la categoría en la que se disputaban los Kit Car.
Un campeón modesto:
La historia es brutal. ¡El primer título mundial se logró gracias a un coche de calle! Y la historia no termina ahí. F. Fons consiguió ese volante in extremis. El andorrano había quedado subcampeón de la Copa Marbella en 1994. ¡También fue subcampeón de la Copa Ibiza en 1995!
Un gigante de la velocidad:
Por reglamentación, los dos primeros clasificados ya no podían seguir compitiendo en esa copa de promoción. Fons compró un Ibiza Grupo A de Carlos Solé y así dio el salto al mundial en el rally de Portugal del 96. Poco después, propuso a Seat Sport la opción de seguir en el mundial con un Grupo N. ¡Aprovechando los "muletas" que los pilotos utilizaban para los reconocimientos del mundial, F. Fons pagaba sus gastos y corría! ¡El coche ya estaba allí por los reconocimientos!
La evolución de un campeón:
El andorrano fue cumpliendo con los objetivos que le marcaba Seat, que era terminar para ir acumulando puntos. En Argentina, Australia, Nueva Zelanda y el RAC recogió 36 puntos y el título lo ganó Seat por 10 de ventaja frente a su rival más directo.
El Seat Ibiza Kit Car nunca fue la máxima expresión de la categoría F2. En su momento, sus rivales franceses estaban muy por encima, con diferencias de alrededor de 2 segundos por tramo. Eran más anchos de vías y contaban con mecánicas que giraban por encima de las 10.000 revoluciones, con potencias que pasaban de largo los 300 caballos.
Un corazón de campeón:
El primer Seat Ibiza Kit Car estaba animado por un motor de cuatro cilindros en línea atmosférico de 1984 cc, una mecánica que anunciaba 250 caballos a 7.000 revoluciones. Montaba una caja de cambios secuencial de seis relaciones y declaraba 930 kg sobre la báscula.
Inicialmente, su motor entregaba 260 caballos y el tren delantero sufría de lo lindo para poder transmitir todo ese potencial al asfalto. A lo largo de la temporada se terminó reduciendo la potencia a 250 caballos para mejorar la tracción. Un motor que era la evolución del 2 litros 16 válvulas del Volkswagen Golf GTI de calle.
Un sueño hecho realidad:
Antes de salir solo al circuito de Moradebra, me di unas vueltas con Antonio Riús al lado. Riús fue el piloto de pruebas de Seat Sport durante el desarrollo del Seat Ibiza Kit Car. Él fue quien puso a punto estos coches y mejor que él no los conoce nadie.
¡Por fin ha llegado el momento de probarlo! Pero creo que este no es el atuendo adecuado.
¡Prueba de fuego!
Ahora sí. ¡El Seat Ibiza Kit Car se mueve de atrás! La goma está fría. ¡Bueno, cambio secuencial, seis marchas! ¡Tienes que tirar la palanca hacia ti, pero para bajar, si no vas muy fuerte! Estoy yendo un poco lento. ¡Pues entonces casi mejor apoyarte con el embrague para ayudar! ¡Guau! ¡Es bestial! ¡Toda la vida viendo esas cámaras onboard del Mundial de Rally que subían la palanca aquí! ¡Y puedo hacerlo yo hoy! ¡Bestial! ¡No me lo creo! ¡No me lo creo! ¡Qué guapo! ¡Guau!
Un campeón en evolución:
Y la segunda no ha terminado de entrar. ¡Joder! ¡Qué pasada! ¡El paso por la dirección es súper ágil! ¡Guau! ¡Va muy bien este coche, gira muy plano! Los frenos son una pasada. ¡Es increíble que este coche tenga 25 años, va! ¡Parece un hot hatch de ahora de de 300 caballos! ¡Guau! ¡Es suave al subir los pianos! ¡Increíble! ¡Increíble! ¡Bestial!
El Ibiza Kit Car Evo 2:
En el desarrollo del Seat Ibiza Kit Car Evo 2, que se introdujo en abril de 1997, intervino el francés Benoit Bagur. La potencia creció hasta los 270 caballos, pero se destacaba por las numerosas mejoras aplicadas tanto en las suspensiones como en el monocasco.
Se diseñó una nueva jaula antivuelco más rígida. Se cambió la geometría del MacPherson delantero y también se rediseñó por completo la suspensión trasera. Estos cambios en el eje posterior fueron claves para mejorar las prestaciones del coche.
La caja de cambios Hewland recibió unos desarrollos más largos. Asimismo, las nuevas llantas de 18 pulgadas permitieron montar frenos más grandes. Delante recurría a pinzas de seis pistones con discos de 376 mm y detrás, pinzas de cuatro pistones con discos de 280 mm.
Un campeón total:
A pesar de las numerosas y sustanciales mejoras, seguía estando lejos de los Maxi Mégane y del 306 Maxi sobre asfalto. Seat Sport se concentró en hacer un coche que fuese capaz de batir a sus rivales en todos los terrenos y no centrarse únicamente en el asfalto, como sí hicieron los franceses.
De este modo, se dio lugar a un coche capaz de ganar tanto sobre la nieve de Suecia como la tierra del Acrópolis. ¡Aún así, Hari Rovanperä llegó a ganar sobre asfalto en Italia ese 1997, quedando décimo absoluto!
En 1998, Rovanperä terminó quinto absoluto en el durísimo Rally Safari. ¡Toda una demostración de la robustez del Seat Ibiza Kit Car!
Junto a sus compañeros de equipo, Toni Gardemeister y Win Percy, esa temporada 1998 lograron el tercer título de marcas en la categoría de 2 litros.
Un legado imborrable:
Los esfuerzos de la temporada 1999 se centraron en el Córdoba World Rally Car, con lo que lamentablemente se dejó de lado al Seat Ibiza Kit Car, un coche que sin duda alguna habría ganado un cuarto título de 2 litros esa temporada.
El Ibiza Kit Car Evo 2:
Bueno, después de probar el Seat Ibiza Kit Car, toca probar el Evo 2. ¡Y lo caló a la primera! ¡Ahí! ¡Ahora sí! ¡Hostia! ¡Se nota muy distinto al otro, eh! ¡Anda mucho más! ¡Guau! ¡El cambio es bestial! ¡Prefiero la diferencia entre el Evo 1 y el Evo 2, es una locura! ¡Este coche es guau! ¡Qué pasada! ¡Hostia! ¡Es una auténtica pasada!
Un gigante de la velocidad:
Las suspensiones son también increíbles. La gran diferencia de este coche fue en el eje trasero. ¡Guau! ¡O sea! ¡No os podéis imaginar lo bestial que es poder hacer esto de cambiar de marchas como los pilotos de World Rally Car de la época! ¡Siempre me colaba ahí! ¡Las de veces que había visto esa onboard de de Panizzi con los 306 Maxi! ¡Y estar dentro de un Kit Car auténtico! Es que no tiene precio. ¡No tiene precio!
Un sueño hecho realidad:
¡Guau! ¡No me lo creo! ¡No me lo creo! ¡Quiero uno! ¡Qué pasada! ¡El coche en sí es mucho más salvaje que el Evo 1! ¡El coche en sí es mucho más salvaje que el Evo 1 en todos los aspectos, es es más brutal! ¡Qué bestia! ¡Qué bestia!
Un campeón inolvidable:
Los Kit Car aparecieron a principios de la década de los 90 con potencias en torno a los 150 caballos. ¿Quién iba a decir que a finales de esa misma década tendrían el doble de potencia y encima serían capaces de ganar a los todopoderosos Grupo A y World Rally Car? Estos Seat Ibiza Kit Car son una demostración del potencial que escondían estos coches. Para muestra, están sus tres títulos de campeón del mundo.
Un campeón fuera de producción:
Hoy en día es difícil encontrar un Seat Ibiza Kit Car a la venta. Solo se fabricaron 20 unidades del kit Kit Car para el Ibiza. Eso sí, en coches.net ahora mismo tienes casi 20 Seat Ibiza nuevos, clicando en este enlace de aquí arriba. Desde 14.300 euros. Así como más de 3.500 Seat Ibiza de segunda mano, desde apenas 300 euros.
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Preguntas Frecuentes:
¿Cuál es el modelo de Seat Ibiza Kit Car más potente? El modelo más potente del Seat Ibiza Kit Car fue el Evo 2, que contaba con un motor de 270 caballos de fuerza.
¿Cuándo debutó el Seat Ibiza Kit Car en el Campeonato del Mundo de Rally? El Seat Ibiza Kit Car hizo su debut en el Campeonato del Mundo de Rally en 1996.
¿Qué hizo especial al Seat Ibiza Kit Car en comparación con sus rivales? Su gran versatilidad. A diferencia de sus rivales, que se centraban principalmente en asfalto, el Seat Ibiza Kit Car se diseñó para ser competitivo en todas las superficies, incluyendo tierra y nieve.
¿Por qué el Seat Ibiza Kit Car fue tan exitoso? Su robustez, su consistencia en las carreras y su capacidad para adaptarse a diferentes tipos de terreno fueron claves para su éxito.
¿Se fabricó el Seat Ibiza Kit Car para la venta al público? No, el Seat Ibiza Kit Car fue un coche de carreras diseñado exclusivamente para el Campeonato del Mundo de Rally.
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